batalla épica cuando te toca fregar
Estaré unos días ausente queridos lectores. Cada año por estas fechas me voy de campamento y como es normal no escribiré nada. Ya voy por el séptimo y sigo teniendo ese ansia de llegar al sitio de acampada y empezar a montar tiendas, ayudar a los más chicos con las suyas, descargar la furgoneta con la comida y materiales...
Pero antes de marchar os quiero pedir algo. Algo que a veces olvidamos y que deberíamos recordar cada día: hace unos años (por tu apariencia diría que pocos, mozo) fuimos un espermatozoide entre 250 millones que llegó al óvulo y nos constituyó en lo que hoy somos. Partiendo de eso, que no es poco, debemos dar las gracias cada día por estar aquí, sanos y cuerdos. Por poder ver el sol salir cada mañana si nos diera por levantarnos temprano, por tener pan que llevarnos a la boca, y por tener personas que nos quieren y nos cuidan. Eso es más que suficiente.
No os quejéis por tonterías, por favor. Resulta insultante escuchar o leer cosas como ''qué asco de vida'' por no ir a una fiesta o por no tener unas zapatillas de playa a conjunto con mi bañador verde agua mientras hay personas que no pueden asegurar que al día siguiente vayan a comer.